viernes, 8 de junio de 2012

Consulte a mi perro


Éste es el primer artículo que inaugura mi blog, no quise obligarte a leer una aburrida introducción sobre lo que hago, mi experiencia o quien soy, elegí esta anécdota por su carácter amable y la sorpresa que me causó. Suelo tratar muchos temas en mis consulta de tarot pero nunca había llegado ningún consultante preguntando lo que me preguntó una jovial clienta al final de la consulta “quiero saber qué piensa mi perro respecto a él”, “él” es su nuevo amor, y formulando mejor la pregunta, lo que mi consultante quería saber era la sensación que generaba en su perro la presencia del chico. Es evidente que para esta dulce mujer su perro es un miembro más de la familia, un ser especial e importante cuyo estado de ánimo y percepción de la realidad puede repercutir de alguna manera en las decisiones importantes de su vida. Lo comprendí perfectamente y hasta me avergonzó un poco mi sorpresa, saqué mis  cartas y el resultado fue el siguiente: Seis de Oros, Sota de Copas, Rueda de la Fortuna, Emperador, cierro la tirada con el arcano de La Luna. El perro estaba ante  un hombre que intentaba ganarse su aprecio dándole comida y tratándole con cariño, pero percibía en él un carácter frágil y cambiante, inestable que oscilaba entre la inseguridad y el despotismo, alguien que en algunas ocasiones intentaba darle órdenes con un tono poco agradable, esto entre otros aspectos negativos respecto a su conducta y energía hacían al perro dudar de la sinceridad del nuevo novio de mi consultante y por tal razón en ocasiones solía sembrarse como un guardia de seguridad junto a ella mientras estaban juntos los tres. La actitud del perro había sido interpretada erróneamente como celos, según mi lectura, el animal buscaba protegerla hasta que ambos conocieran mejor al pretendiente.

No es una nueva noticia que los perros y los animales en general son hábiles receptores de frecuencias energéticas de orden espiritual y que poseen una amplia perspectiva de la realidad que va más allá del plano físico. Si tienes una mascota préstale atención a sus mensajes.

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