miércoles, 4 de septiembre de 2013

Reinas sin Corona


Apuesto a que no es la primera ves que escuchas o lees frases gastadas, que suenan a halago barato, a frase hecha para el día de la mujer o el día de la madre "lo celebramos hoy, pero tu día es todos los días..." Con este artículo no intento agradar o disgustar a nadie, simplemente hacer uso de este espacio digital para volcar en letras lo que a diario veo en mi tarot, y en él no solo veo venturas y desventuras, en mis tantas lecturas veo que todas las mujeres son reinas.


Te explicaré porqué. Quizás por la influencia de los cuentos de hadas, quizás por impulsos primigenios, muchas niñas, o chicas jóvenes siempre se han identificado con el arquetipo de la princesa, imagen dócil, virginal, símbolo de belleza y fragilidad, habida de un predestinado rescate, en una espiral eterna, aguardando paciente la llegada de ese príncipe que no siempre llega. En el tiempo precioso y perfecto de su espera, la joven vive las experiencias que le tocan vivir y la vida misma la moldea poco a poco, y la convierte en una reina, son corona, una reina con cicatrices de guerra. Con mi trabajo he conocido a miles de mujeres, he visto su presente pasado y futuro, he visto cómo se estructuran sus vidas, dónde se cimientan sus sueños, esperanzas, deseos y un mar profundo y complejo de sentimientos y pensamientos irracionales y apasionados sobre los que navegan vidas construidas con esfuerzo, dolor y valentía. No hay caracteres suficientes para reproducir tales universos, tantas historias, tantas alegrías y lágrimas, pero para eso tengo los símbolos, mis símbolos sagrados. Para representar lo que quiero decir me valdré de cuatro cartas que puedes encontrar en una baraja de tarot, las cuatro reinas de los cuatro palos (Reina de Oros, Reina de Bastos, Reina Espadas, Reina de Copas). Cada uno de estos personajes, bellamente pintados en la baraja, encarna características únicas que no son más que proyecciones gráficas de mujeres reales, conductas, formas de pensar y sentir, que nos acompañan desde que somos especie. Con las analogía siguientes no pretendo limitar la influencia de las cartas mencionadas, no quiero restringir su poder al género femenino, aunque es su esencia, está claro que las cartas van más allá del género, lo masculino contiene lo femenino y viceversa.

La Reina de Oros son todas esas mujeres que tienen una capacidad innata para estirar el dinero o multiplicarlo misteriosamente, porque eso es lo hacen parecer, tal como Cristo multiplicó los peces, ellas   logran hacer que un sueldo en plena crisis alcance hasta fin de mes. Están bendecidas por la influencia de Madre tierra y siempre sabrán que necesitas para estar bien, porque son como médicos de la naturaleza y como su elemento es la tierra son el pilar fundamental de la familia. Disfruta de las relaciones estables, una pareja productiva, que sepa descansar a su lado y vivir una vida interesante. La tierra es la tierra, fuerte, inmensa, y por eso hay que tener cuidado con sus terremotos...


La Reina de Bastos disfruta mucho de existir en sociedad, le gusta ser admirada y cortejada, esta bendecida por la luz del Astro Rey, y nunca para desapercibida. Seguro la conoces, es emprendedora y no hay empresa que no se atreva a dominar, es capaz de liderar y sabe trabajar en equipo. Su luz es tan brillante que siempre es foco de envidias, ella necesita protegerse y saber que no puede confiar en todos. De lo que si puede estar segura una Reina de Bastos es que necesita un amante fogoso y lleno de vida que a diario le haga saber lo bella que está.

La Reina de Espadas... Qué peligrosas son... La "famme fatale". Que nadie se interponga en su camino, que nadie se meta con los suyos, sabrá usar hábilmente su espada para batallar con la bestia más feroz y luchará hasta su último aliento. Saben defenderse con la palabra, con la ley y si es necesario con los puños o la magia, son las guerreras de la vida, las amazonas que no descansan. Una Reina de Espadas necesita enfocar todo su coraje en sus proyectos de vida, si lo sabe hacer, logrará cuanto quiera. Para ella la pareja ideal es aquella que no la domine, pero que lo intente, ella siempre manda, pero quiere un chico que le plante batalla.

La Reina de Copas, esa mujer sentimental, intuitiva y maternal, sabe escuchar y necesita ser escuchada, siempre está ahí para ti y necesita que alguien esté para ella, pero ese alguien usualmente va a fallarle. Esta reina tiene grandes poderes y en muchos casos los desconoce, tiene el don del arte y la belleza pero su debilidad está en no confiar en sí misma. Ella nos conoce a todos, lee nuestros ojos, sabe si mentimos o decimos la verdad, sabe si estamos bien o mal pero ella para nosotros siempre será un gran misterio, un mar profundo de secretos. Su amante ideal es un guerrero, un personaje de fuego que le complemente.

Creo que no hace falta decir que estos  arquetipos se mezclan entre sí formando reinas híbridas y mucho más complejas, mucho más poderosas.

¿Sabes qué Reina eres tu?

martes, 27 de agosto de 2013

El acoso de los desencarnados


Varias veces a la semana vienen a mi personas buscando ayuda, se sienten incómodos y se disculpan de antemano porque pueden quedar como "locos", buscan mi ayuda porque en otras personas han entrado cejas que se levantan, incómodos silencios e invitaciones al psicólogo. Ellos viven momentos de autentico terror casi a diario, y muchos se sienten incapaces de distinguir entre la verdad y la fantasía, simplemente porque sus conocidos les repiten a diario que su problema se trata de una ilusión. Pero yo me pregunto ¿Qué es la realidad? ¿Lo que perciben los sentidos? puede que esto sea la "verdad" pero me resulta tan primitivo y limitado... Significa que la realidad está limitada por lo que nuestros cinco sentidos nos dicen del mundo, y cada pregunta me la respondo con otra pregunta ¿Acaso tenemos sólo cinco sentidos? es lógico que asís sea, dicen algunos. Recuerdo que en el pasado era lógico que la Tierra fuera plana... 

No sabemos qué pasa después de la muerte, pero sí sabemos que hay un mundo espiritual, y que en ese mundo se almacena energía, que de alguna manera también se filtra al nuestro mediante portales, de esa manera pueden "saltar" ciertas entidades o espíritus entre los mundos, y ser vistos por aquellos que tienen el don. Cuando hablamos de espíritus, nos referimos a desencarnados, seres que han sido humanos y ahora son solo energía, que han pasado el umbral a esta  dimensión o desde la muerte de su cuerpo no han logrado la evolución. Hace poco una chica me comentaba que su mayor problema no era tener ese don, su problema era lidiar con el miedo que estos seres le producen cuando los ve o cuando se acercan. Para introducir mi respuesta le puse un ejemplo sencillo:

Imagina que una anciana va por la calle, ella conoce mucha gente, se los topa por el camino con alegría, pero a lo largo de su recorrido se va encontrando con desconocidos poco agradables para ella, personas con poca higiene, personas con aspecto peligroso o agresivo, timadores, en fin, toda una gamma de personajes de la gran ciudad. Ella no siente ningún temor mientras camina, llega a su casa y se recuesta en su sofá a tomar una cómoda siesta. 

La señora del ejemplo anterior se siente tranquila, segura, pero apuesto a que se sentiría aterrada si estos personajes la cogieran del brazo a lo largo de su camino, la persiguieran, le gritaran cosas, le susurraran obscenidades al oído, y para completar el ciclo de acoso, uno de ellos acercara sus ojos a la cara de la anciana mientras duerme, esperando pacientemente a que despierte. Lo mismo que sentiría esta mujer en el segundo caso, es lo que pueden llegar a sentir muchas de las personas que he tratado, y yo explico: Esa mujer está tranquila porque hay leyes que la protegen de los delincuentes y porque en su casa simplemente cierra puerta y nadie va a entrar a perturbarle. Lo mismo con los espíritus, si tienes el don, tienes que hacer que te respeten, los espíritus se acercan por muchas razones (hablaremos de ello en otros post) pero no tienen derecho a invadir tu espacio si tú no lo deseas, las puertas no le limitan pero usando correctamente la magia puedes sellar tu hogar y proteger tu campo magnético. También puedes pedir ayuda a entidades de poder para que te protejan, el punto es que no tienes que sentir que tu don es una maldición y tu don no tiene porqué ser un punto focal para que los desencarnados te acosen.  

Si eres víctima de este problema y necesitas ayuda para delimitar tu espacio seguro puedes ponerte en contacto conmigo y contarme tu caso. Si quieres compartir tu historia escríbenos abajo. 



martes, 20 de agosto de 2013

Lo que piensan los demás.


Si viviaramos en una isla desierta no creo que nos sentiríamos del todo completos, biológicamente los humanos somos seres gregarios, necesitamos del grupo, necesitamos convivir en manada, salvo algunas excepciones. Prueba de ello, este blog, el facebook, las grandes ciudades, etc, etc, etc. Tenemos implantado un chip que nos dice (conocer gente es sobrevivir), aprendemos patrones de comportamiento, las frases de moda, estilos de vestir, idiomas, hacemos amigos, porque necesitamos que sepan que existimos, hacer contactos, establecer gratas relaciones sociales y amorosas. Aunque muchos no lo acepten, nos importa lo que otros piensan y eso está bien, pero ¿Hasta qué punto eso puede ser sano? 

Apuesto que conoces a la típica persona que es infeliz en su matrimonio desde que se casó pero no se atreve a cambiar porque "¿qué dirá la gente?", conocidos que han sido estigmatizados por sus padres eligiendo carreras desagradables para ellos, gays que siguen en el armario o personalidades extraordinarias reprimidas por estar "fuera de lugar". Este tipo de cosas te pueden estar pasando a ti o a los seres que aprecias y para sanarlo el punto de partida eres tú mism@ y el grado de importancia que le otorgas a la presión social, que evidentemente no es igual en distintas zonas geográficas. Lo que los otros piensan, lo que nosotros pensamos  está estructurado en una complicada base arraigada en la cultura de cada persona. Hagamos un experimento, piensa en algo, en un objeto, que no esté construido con ningún material conocido, de ningún color que conozcas, que huela a algo nunca jamás percibido por el olfato y que tenga una forma tan extraña que nadie logre identificar. Por más fértil que sea tu imaginación necesitamos beber de lo que sabemos para crear algo o interpretar lo que vemos. Lo que otros piensan de ti esta basado en sus creencias, sus propios filtros culturales, religiosos, emocionales y sociales. No permitas que te agredan o limiten dichos filtros, usualmente ásperos y  gruesos, no tienes porqué aceptarlo, no tiene poder sobre ti, ayúdales si puedes y si lo deseas, se compasivo pero no sumis@. Eso que piensan no es tu karma, es el suyo, porque están pensando en sí mismos, y son ellos quienes deben trabajar en su evolución personal. Tu evolución amerita que cumplas tus metas, tus sueños y seas quien quieres ser. 

lunes, 8 de julio de 2013

¿Alguien te escucha realmente?


“Cada cabeza es un mundo” dice la sabiduría popular, pero ¿conocemos realmente todos esos mundos que nos rodean? Convivimos con compañeros de trabajo, de estudio, familiares parejas y en muchos casos desconocemos gran parte de ese universo. No sabemos de lo que nos perdemos. En nuestra cultura se nos enseña que si no eres visto no existes, lo visual tiende a ser más importante que lo que ocurre dentro, y poco a poco ese maravilloso mundo interior se va haciendo más estrecho y esa cortina que lo separa del resto del mundo se hace más densa. El problema está en que evitamos mostrarnos tal y como somos, pensamos que lo que somos realmente no importa a otros, que nuestros gustos o aquello que nos causa alegría son superfluos porque no encajan en el canon común. Intentamos seguir un patrón, un orden impuesto por otros factores usualmente comerciales de los que no hablaremos ahora. Sacrificamos nuestros deseos y nuestra escancia por complacer a otros y estos otros hacen lo mismo y así una cadena de mentira y auto represión. Es obvio que hablar con franqueza no siempre sienta  bien a todos, pero podemos ir entrenando los oídos de las personas que amamos, valora cada sentimiento y cada pensamiento exprésalo con honestidad y así iremos cimentando un camino seguro y estable donde se valore más el pensamiento individual y donde cada día podamos sorprendernos, enamorarnos, aplaudir, etc. a seres auténticos. 


Comparto esta reflexión porque a lo largo de mi trabajo, escuchando y escuchando siento que no existirían tantas tormentas en los corazones de mis consultantes si toda esa fuerza reprimida saliera a tiempo, si toda esa tormenta hubiera fluido antes en sanas lluvias, sanas lluvias que otros tenían el derecho a escuchar, porque así se sana, hablando y escuchando. Pero se sana hablando con honestidad y escuchando con atención. Hoy nadie escucha, y por eso nadie quiere hablar, y quien habla no es del todo sincero, el ego nos hace interpretar el personaje hasta que ya la máscara no se sostiene. Estudios explican que cuando contamos un problema a otra persona, el mismo comienza a parecer menos agobiante y pasa lo contrario con las alegrías, cuando compartimos una alegría el sentimiento de goce se multiplica.

Si no tienes una persona que te escuche escríbeme. Si quieres conversar sobre este tema, contáctame.